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¿Dónde estás Bernadette?

Richard Linklater vuelve con una inspiradora historia basada en la novela de Maria Semple, donde Cate Blanchett nos enamora de nuevo encarnando a la maravillosa Bernadette.

 


Bernadette Branch es una madre de familia que adora a su inteligente hija Bee (Emma Nelson), y a su marido Elgie (Billy Crudup), un importante creativo de Microsoft. Viven en una vieja edificación que en otros tiempos fue utilizada como escuela de señoritas, y que Bernadette eligió comprar con el fin de restaurarla, pero eso nunca llegó a suceder. Conforme la película se desarrolla, descubrimos que Bernadette fue en su juventud una gran promesa de la arquitectura, pero que después de dos espectaculares y premiadas creaciones, cesó de trabajar de repente.



Vive ahora en Seattle, ciudad que no termina de convencerle, en donde además no consigue hacer amigos ni llevarse bien con nadie (especialmente con su vecina Audrey, interpretada por Kristen Wiig). Su ansiedad social va incrementando hasta llevarla a hacerse de los servicios de una asistente virtual de la India con el fin de evitar interacción con la gente. Este conjunto de problemas lleva a Elgie a intentar una intervención acompañado de una terapeuta, pero en medio de la misma, Bernadette desaparece.


Where you’d go, Bernadette? (En México como ¿Dónde estás, Bernadette?) es la nueva película del exitoso director Richard Linklater (Boyhood, School of rock), quien vuelve con esta adaptación de la exitosa novela de Maria Semple, publicada en 2012. Producida por Annapurna Pictures, esta película nos trae como protagonista a la siempre fantástica Cate Blanchette, que aprovecha este complejo e interesante personaje para sacarle todo el provecho: Se nota una mujer dulce y amorosa, pero luchando internamente con sensaciones que no consigue calmar. Mientras nos preguntamos hacia dónde fue y qué le hace falta a Bernadette para estar mejor, es inevitable que cuestionemos también las ocasiones en que nosotros también nos hemos sentido perdidos, en lo peligroso que puede ser abandonar lo que amamos, y estas reflexiones resultan ser lo más destacable y valioso de esta película.



Shane F. Kelly nos regala una linda cinematografía, en donde apreciamos durante la primera parte de la película la casa de Bernadette, ciertamente derruida pero con una decoración que enmarca bellamente el amor familiar; y durante la segunda parte nos roba el aliento con unos hermosos paisajes filmados en Groenlandia. Todo este fondo es importante porque nos contextualiza lo importante que es para Bernadette la creación de lo hermoso, lo atrevido, lo perdurable. La gran moraleja de este filme es justamente esa: Somos lo que creamos, lo que defendemos y lo que amamos.






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